Las tormentas eléctricas son un fenómeno natural que produce descargas eléctricas a tierra, comúnmente conocidas como rayos. El rayo, al ser una descarga de alta potencia, causa daños diversos tanto a los seres vivos como a los objetos. De ahí el impacto en la vida del ser humano.
De acuerdo al conocimiento científico actual, el fenómeno del rayo es un hecho que no puede evitarse. Afortunadamente los sistemas de protección contra descargas atmosféricas (SEPTE) permiten minimizar el riesgo de daño.
Los sistemas que se encargan particularmente de los efectos directos por impacto, se denominan sistemas externos, o más popularmente “Pararrayos”. Básicamente un pararrayos es un sistema que se encarga de recibir el impacto del rayo, posteriormente conducir y finalmente disipar la corriente de descarga hacia tierra de manera segura, minimizando así el riesgo a las personas e inmuebles.
Los sistemas encargados de los efectos indirectos del rayo, es decir, las sobretensiones transitorias, se denominan sistemas de protección contra sobretensiones.
Es importante destacar que, de acuerdo al consenso científico mundial -plasmado en la correspondiente normativa en todo el mundo-, no existen sistemas capaces de evitar o repeler los rayos.
Por lo anterior, queremos recomendarle atentamente valorar y elegir sistemas de protección funcionales, y asimismo evitar caer en manos de proveedores de productos milagro que carecen de sustento científico y normativo, y que lo exponen a usted a grandes riesgos.
En ANPASA estamos comprometidos ética y responsablemente con nuestros clientes, ofreciendo los mejores sistemas de protección contra el rayo con tecnologías reales, aceptadas internacionalmente y verificadas mediante certificaciones otorgadas por las más reconocidas instancias a nivel mundial.